jueves, 13 de febrero de 2020

Cómic Recomendado: BESTIAS SALVAJES

Lola, Josh y Gizmo son tres adolescentes un tanto marginales: los demás jovenzuelos que les rodean los ningunean y se burlan de ellos, así como los adultos, que ni los entienden ni los apoyan. Para rematar sus anodinas existencias, la ciudad en la que viven se encuentra invadida por animales salvajes que han tomado las calles como si de su hábitat natural se tratara: cocodrilos en los lagos, osos pardos en los jardines, jirafas, leones y monos en los solares... vamos, una bestial locura. El día a día de cada uno de ellos se basa en encararse lo menos posible tanto a esos humanos como a esos animales, peligrosos ambos, que se han propuesto hacerles la vida imposible. Entre fieras, madres alcohólicas, matones de instituto y demás escollos, el descubrimiento de la edad adulta por parte de nuestros protagonistas será, como se dice vulgarmente, "a base de hostias".
 Con esta premisa tan pesimista como alarmista, el parisino Loïc Godart nos presenta Bestias salvajes, su primera obra en solitario publicada en castellano, de la mano de la editorial Nuevo Nueve, tras conocer su arte por estos lares gracias a los álbumes El corazón de las tinieblas y El jugador (ambos editados por Norma Editorial). Una fábula onírica que indaga en el negro y mezquino corazón de muchos seres humanos, en porqué la sociedad en la que vivimos es cada día que pasa más violenta y desoladora, en porqué los más desvalidos tienen cada vez menos cabida en este mundo despiadado; y todo esto visto desde los ojos de una muchacha y dos zagales que no acaban de encontrar un hueco en su entorno y que se resisten, a la vez que lo desean como locos, convertirse en adultos. El hecho de la invasión animal que sufre la ciudad en la que ocurren los acontecimientos dota a la historia de una magia que roza lo fantástico, pero a la vez la impregna de un realismo salvaje y doloroso, que ayuda a mostrar que el peor enemigo para el hombre es el propio ser humano, su prójimo.
El arte de Godart, que en muchos aspectos recuerda a un tosco Paul Pope, más estilizado y europeo, y el uso de una tonalidad cromática apagada pero fiera, le da a Bestias salvajes ese tono devastador que una historia así debe tener, a la vez que ayuda a atisbar los pocos rayos de esperanza que logran divisar el trío principal de este cómic, apocalíptico y reflexivo a partes iguales.

Pako